Los armarios de cocina y otros armarios
empotrados tienen que soportar mucho peso y necesitan una
sujeción a la pared que sea lo suficientemente estable y
resistente. Lo mejor es utilizar tacos
y escarpias.Pero también existe la posibilidad de colocar
carriles de montaje en la pared (a la venta en
establecimientos especializados en construcción o grandes
superficies de bricolaje), en los que sólo hay que
enganchar y colgar los armarios.
El procedimiento:
Marque los puntos de sujeción con la
ayuda de un nivel de burbuja.
Asegúrese de que debajo del sitio
donde quiere colgar los armarios no pasa ningún cable. Lo
mejor es utilizar un detector
de metales.
Extraiga el polvo de las perforaciones
con un aspirador, o bien simplemente soplando. Tenga
cuidado de que no le entre polvo en los ojos.
Inserte el taco y acabe de introducirlo
con unos cuantos golpes suaves de martillo. Así, los
tacos quedarán fijados correctamente.
Enrosque en los tacos las escarpias y
cuelgue los armarios.
Para unir los armarios entre sí, tome
una broca pequeña para madera y realice unos taladros
pasantes en las paredes laterales. A continuación, una
los armarios enroscando los tornillos. Para los taladros
pasantes, tome tornillos que posean una pieza opuesta,
como por ejemplo una tuerca. Si no desea traspasar la
madera por completo, puede unir los armarios entre sí
solamente con un tornillo para madera.
Equipo necesario:
Para taladrar en mampostería,
utilice una taladradora de percusión Bosch.
Además: broca
para piedra (diámetro de 6 a 8 mm),taco
de plástico (diámetro de 6 a 8 mm), ganchos roscados
adecuados (tenga en cuenta las indicaciones del fabricante
en el embalaje de los tacos) y brocas
para madera (diámetro 3 mm).